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lunes, 8 de junio de 2015

Lactancia materna y los dientes del bebé



Como ya comenté en una entrada anterior Princesota tiene bastantes dientes ya y la verdad es que han sido varias las personas que me han preguntado qué tal la lactancia con todos esos dientes. Preguntan si me hace daño, si noto los dientes...

Pues bien voy a contar mi experiencia ya que cuando busqué información por internet sobre este tema, me encontré verdaderos horrores que me asustaron bastante.



A los cuatro meses los dos primeros dientes de Princesota empezaron a asomar, la verdad es que la lactancia seguía igual, yo no notaba nada, así que yo seguia mi lactancia tan contenta. Después vinieron las paletillas superiores y parecía que todo seguía igual, pero en cuanto crecieron un pelín Princesota empezó a clavármelas y la verdad que empecé a sentir que tenía los pezones irritados y que cuando se enganchaba sentía algo de dolor.

Lo curioso es que no todas las veces era así, había momentos en los que el enganche molestaba (por la irritación que ya tenía) pero el resto de la toma iba como la seda, pero otras veces la toma completa era con los dientecillos clavándose, incluso me dejaba la marca. No sabía si era algo normal, que simplemente pasaría o que iría a más conforme crecieran los demás dientes.

Empecé a buscar por internet y como he dicho antes leí unas cosas que me hacían pensar que tal vez el fin de mi lactancia estaba cerca, pezones en carne viva, heridas sangrantes sin solución y algunas madres decían que había que aguantar por sus pequeños, pues yo perdonadme pero no estaba dispuesta, más que nada porque era algo que no me parecía normal.

La cosa era que mi caso no era claramente tan grave como los que había visto, y entre tantas heridas encontré algunas frases sensatas, como por ejemplo soltar a Princesota si me hacía daño y que se volviera a enganchar. Pues eso hice, cuando notaba sus dientes clavándose la desenganchaba, había veces que se volvía a enganchar mal (o más bien clavándome los dientes) y otras veces sí que lo hacía bien.

Si se enganchaba mal normalmente no volvía a desengancharla porque tampoco quería molestarla y el dolor no era para tanto, las cosas como son. Estuvimos así una semana y media o dos semanas, la verdad que no lo recuerdo muy bien, pero Princesota dejó de clavarme los dientes y la lactancia volvió a ser completamente placentera. Supongo que ellos también deben aprender a seguir lactando con sus pequeños dientes, sinceramente no sé si modifican en algo la postura de la boca, pero yo no noto absolutamente nada y eso que han seguido saliendo dientes.

Lo que sí se ha escapado alguna vez es un mordisquito y eso si que joroba bastante... Han sido poquísimas veces y la verdad que siempre ha sido porque estaba jugueteando y al final ¡zasca!  mordisquillo al canto. En esos casos me pongo seria y le digo un NO para que entienda que eso duele, aunque sinceramente no se si sirve de algo, lo que pretendo más que nada es que entienda que hay que tener cuidado, aunque con el grito que pego no se si ya se da por enterada...


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