Inicio

jueves, 27 de agosto de 2015

Revisión de los 12 meses



La semana pasada tuvimos la revisión de los 12 meses, en la que tocaban también vacunas.
Fue una revisión distinta a las demás ya que Princesota lloraba y lloraba y no quería estar en la camilla ni que la tocaran, hasta ahora siempre había estado quietecita y se dejaba hacer sin problema, pero esta vez la pediatra casi no pudo ni pesarla, era como un pez que se te escapa de las manos.

viernes, 21 de agosto de 2015

Hoy hace un año que te conocí



Recuerdo los nervios la noche anterior y esa mañana del 21 de agosto en la que nos dirigíamos al hospital sabiendo que en unas horas íbamos a vernos las caras por primera vez.
Dilatación, contracciones, epidural, empuja y por fin apareces en nuestras vidas. Mi primera reacción: llorar y mientras te llevaron a pesarte, medirte, etc., tu padre lloraba aún más que yo.

Los primeros momentos fueron difíciles, tanto que no disfruté nada de la maternidad, la lactancia no iba bien, las hormonas iban y venían como una montaña rusa, cansancio, falta de sueño, parece que todo te viene grande y no sabes muy bien qué sientes... ¡Pero si un niño es la felicidad más grande del mundo! dice la gente, pero aunque estás en un estado de enamoramiento,también estás al borde del precipicio.

miércoles, 19 de agosto de 2015

Primer viaje en avión de Princesota


Con motivo de las vacaciones de verano, hemos hecho un viaje para visitar a los primitos de Princesota.

Para ello tuvimos que coger un avión, el primero de Princesota y nuestro primer viaje en avión como papás. Reconozco que me da muchísima pereza, muchas horas esperando a pasar controles, embarcar, despegar, aterrizar, coger la maleta... En fin, que no es mi medio de transporte favorito.
El viaje que hacíamos concretamente duraba sólo una hora, pero desde que salimos de casa hasta que llegamos a nuestro destino pasaron 4 horas, lo que para mí es una desesperación. No obstante, la experiencia no estuvo nada mal y descubrí varias cosas de las que no tenía ni idea.